02/09/2020
Entrevista a Alicia Negrón Fraga, Enfermera Especialista Familiar y Comunitaria
¿Por qué es importante vacunarse en estos momentos?
Como es bien sabido, las vacunas previenen enfermedades.
A nivel del Sistema Sanitario, es importante no sobrecargar más los servicios de salud con problemas que sean prevenibles.
El aumento de la demanda de atención sanitaria causada por la COVID19 es capaz de colapsar los sistemas. Reducir el número de personas que acudan a urgencias o requieran ingreso en una cama de hospitalización o UCI, es fundamental cuando puede producirse una nueva situación de déficit en cualquier momento.
Nuestro sistema de salud es capaz de asumir sin dificultades los contagios de estas enfermedades prevenibles en aquellos casos en los que suceden debido a alguna incidencia con la vacunación.
Desde hace tiempo venimos sufriendo repuntes de parotiditis, tos ferina, meningitis, sarampión, varicela, gripe,… muy relacionados con problemas de vacunación. Bien por movimientos antivacunas; despiste en el seguimiento del calendario vacunal, especialmente en adultos, jóvenes y mayores; incumplimiento de las recomendaciones sanitarias; inmunodeficiencias relacionadas con tratamientos inmunosupresores por cáncer, enfermedades reumatológicas…
La última causa no puede evitarse. Es población de riesgo que, o bien no puede vacunarse, o tiene el sistema inmunológico tan debilitado que aunque se vacunen no desarrollan defensas. Estas personas son especialmente vulnerables.
Los otros grupos, sin embargo, tienen fácil solución. Simplemente, deben acercarse a su centro de salud y que su enfermera les vacune.
¿Y a nivel individual? ¿qué implica no estar vacunado?
A nivel personal implica perder días de trabajo, por enfermedad, o por cuidar de otras personas de la familia. Días de enfermedad, malestar, fiebre,… y en algunos casos complicaciones muy severas o incluso la muerte. Aunque sucede en pocas ocasiones, cuando ocurre rompe la vida y la familia de a quien le toca.
Los casos más graves suelen ocurrir a personas jóvenes y sanas. Enfermedades como la enfermedad meningocócica invasiva (EMI), o varios tipos de cáncer producidos por el virus del papiloma humano (VPH), son ejemplos de consecuencias graves en personas jóvenes sanas no vacunadas.
¿Cuánto tiempo dura la inmunidad?
La mayoría de las vacunas duran para toda la vida. A lo sumo, requieren un recuerdo. Neumococo, meningococo,… se comportan así.
Hay una excepción, que es el virus de la gripe, o gripa. Las mutaciones de las que es capaz hace que cada año tengamos que cambiar algunas partes de la vacuna.
¿Cuánto tiempo dura la consulta?
La administración de la vacuna poco más de unos minutos. Se tarda algo más en revisar el estado vacunal de esa persona. Como digo, de niños nuestros padres y madres se aseguraban de que nos vacunaran cuando nos correspondía. Tras administrar la última vacuna infantil a los 14 años, muchos no han vuelto a revisar su estado.
Realmente, con lo que se tarda más es esa revisión de la cartilla. Según el año de nacimiento, le corresponden distintas vacunas. Los riesgos son distintos y algunas vacunas de los años 70 a 2000 requieren un recuerdo dependiendo de cuándo se pusieron.
Personalmente, ofrezco a mis pacientes que me dejen una fotocopia de las vacunas que tienen puestas, especialmente si son de otros países o en otros idiomas. Así cuando vienen a la consulta presencial es sólo poner lo que corresponda.
Y los efectos secundarios?
Los efectos secundarios más comunes son la fiebre y las molestias en la zona de administración 2-3 días tras vacunarse. Existen bulos sobre este tema absolutamente falsos. Los beneficios de la vacunación superan ampliamente los inconvenientes. Ningún Estado invertiría en la compra de vacunas si no fuese así.
¿Por qué cree que esos bulos están aumentando?
Tristemente, creo que nuestra sociedad rica y con un sistema nacional de salud como el que tenemos, ha olvidado en muy pocos años lo que significa no tener un sistema sanitario público potente, o no estar vacunado. Ya no vemos cómo muere alguien por tétanos, una muerte horrible por cierto. Al igual que los niños que mueren ahogados por Tos Ferina. Como no lo vemos, preferimos pensar que no existe. Los bulos suelen ayudarnos a pensar eso, que esas enfermedades que ya no vemos en nuestra sociedad, no existen y no generan sufrimiento ni muerte.
¿ Qué nos diría para concluir?
Diría que si algo nos ha demostrado el nuevo coronavirus es que las enfermedades pueden afectarnos a todos. Y que tenemos que utilizar todos los recursos que tengamos para evitar enfermar. Desde cambiar los procesos como el teletrabajo, mejorar la higiene, la buena alimentación, el uso de la mascarilla o vacunarse contra todas las enfermedades que podemos evitar.
No prevenir se paga caro.