11/09/2024.- Permanecer ingresado en un hospital de agudos es un problema que repercute de manera directa en la eficiencia y la sostenibilidad del sistema sanitario. En España, necesitamos crear recursos que vayan más allá del hospital de agudos, para atender a las fases crónicas, la convalecencia y la rehabilitación de las enfermedades.

“Se estima que en España el 20% de las camas hospitalarias de agudos están ocupadas por personas en situación crónica. Es decir, tienen una situación estable y deben abandonar el hospital de agudos”, afirma Alberto Giménez Artés, presidente de la Fundación Economía y Salud, en una reciente entrevista para Onda Cero.

Los principales problemas derivados de esta situación es el aumento de las listas de espera de pacientes que necesitan ingresar, así como del coste hospitalario. “Estamos pagando de manera innecesaria una cama que cuesta cerca de 800€ al día para una persona que no está recibiendo el servicio que necesita”.

La causa fundamental de la demora en el alta es la falta de recursos de continuidad para el paciente, que regresa a su domicilio en una situación de fragilidad y necesita ayuda social en casa. Por tanto, si no tiene una plaza en un recurso, necesitamos crear esos recursos tanto hospitalarios como ambulatorios.

UN MAYOR ENFOQUE EN LA CRONICIDAD Y LA PREVENCIÓN DE LA ENFERMEDAD

Según el presidente de la Fundación Economía y Salud, la solución a este problema pasa, especialmente, por aumentar los recursos hospitalarios de media y larga estancia para que pacientes crónicos sigan recibiendo su atención sanitaria, pero debe prestarse en un hospital adecuado para eso. Para darle al paciente lo que necesita y en lugar de costar 800€, puede costar 200€ al día. También con la hospitalización a domicilio y la coordinación social y sanitaria que asegure la continuidad asistencial”.

“España actualmente cuenta tan solo con 12.000 camas públicas en hospitales de media y larga estancia. Son muy pocas las camas en comparación con la media europea, que refleja hasta 6 veces más camas en este tipo de centros”, asegura.

En cuanto a las circunstancias sociales de personas en situación de fragilidad y vulnerabilidad tras recibir el alta hospitalaria, Giménez apunta a la importancia de “coordinar los servicios sociales y sanitarios para dar la respuesta adecuada”. Para ello es necesaria “una política sanitaria que aumente la inversión en la prevención de la enfermedad, las fases postagudas y las fases crónicas. Tanto en el campo sanitario como en el social, hay una cantidad enorme de personas esperando recibir servicios a domicilio o en residencias, y eso influye en su pérdida de calidad de vida o el grado de dependencia del paciente”.

Escucha a continuación la entrevista íntegra para el programa de radio “Más de Uno” de Onda Cero (04/09/2024):